Tiene locales comerciales, gastronomía, un supermercado y oficinas, entre otras propuestas
Apostando a un consumo que, en algunos sectores socioeconómicos, se mantiene vigoroso, acaba de abrir en la zona Sur del Gran Buenos Aires, un nuevo centro comercial a cielo abierto. Se llama Nuevo Quilmes Plaza y demandó una inversión de más de US$ 30 millones que fue realizada por el Centro Comercial de Servicios Nuevo Quilmes Plaza y los locatarios. El principal inversor en el fideicomiso son los hermanos Grasso a través de las desarrolladoras Deingra y Landmark Sud junto con otros inversores nacionales.
El paseo comercial abarca una superficie de unos 19.000 m² y es el primer desarrollo comercial de usos mixtos en esa zona, con más de 80 locales comerciales y áreas de oficinas, servicios y viviendas. Según sus desarrolladores, el polo comercial “representa las tendencias de los grandes centros comerciales de otras partes del mundo, con una propuesta de servicios integrados, en un entorno verde y abierto”, describen.
“La falta de proximidad de locales comerciales y la ausencia de servicios en la zona fueron los motores que impulsaron el desarrollo de este nuevo emprendimiento”, explican sus impulsores. Y explican que “era necesaria una propuesta de estas características para los vecinos”, dice Ezequiel Marín, Center Manager de Nuevo Quilmes Plaza. “Encontramos en este lugar todo aquello que busca el consumidor de hoy: aire libre, cercanía, espacios verdes y una superficie que nos permite reunir diferentes propuestas en un solo lugar”. Está ubicado a la altura del km17 de la autopista La Plata-Buenos Aires, en Quilmes, y a 18 minutos del Obelisco.
Acerca de la potencial demanda que puede concentrar un centro comercial de estas características, el Daniel Viarengo, de Havas Group explica sobre la situación actual del consumo: "en la Argentina el contexto inflacionario favorece el consumo inmediato, ya que, si bien las problemáticas económicas inciden de manera diferente, generan un resultado macro similar. Ante las dificultades para trasladar el ahorro hacia el futuro canalizándolo a través de inversiones en el mercado de capitales, en los bancos o en la compra de divisas, por el momento, se está consumiendo", explica.
El paseo de compras quilmeño consta de un área comercial distribuida en dos plantas, con locales de primeras marcas, tiendas especializadas, indumentaria, decoración, salud, belleza y gastronomía. A ésta se le suman áreas de servicios y de salud con laboratorio y consultorios médicos alquilados por el Hospital Británico, un supermercado (Josimar) un gimnasio y una sucursal del banco Macro.
Estos espacios se complementan con un edificio exclusivo de oficinas de 5.000 m², distribuidas en cinco plantas, con un piso destinado a un espacio de coworking y un sector exclusivo de estacionamiento descubierto, con capacidad para 300 vehículos.
Entre las marcas que llegan por primera vez a Quilmes y ocuparán locales de este centro comercial, están Tucson, Le Pain Quotidien y Fabric Sushi.
El proyecto -a cargo del estudio Martín Forcinito Arquitectos y los desarrolladores Deingra y Landmark Sur- comenzó en el año 2018. Desde ese momento hasta hoy generó unos 1700 puestos de trabajo, directos e indirectos, apuntan los dueños del proyecto.
También cuentan que -para la construcción del centro comercial- se priorizó el terreno y se conservó la forestación existente. De hecho,”en su interior hay un gran ombú que data del año 1880 y que lo convierte en un punto de encuentro y espacio de reunión”, señalaron.
