
La muestra se llama “Asomo a las esencias de China” e incluye desde fotografías de espectáculos artísticos a momentos de profunda intimidad, meditación y relajación cotidianos.
Al decir de un crítico de arte, se trata de momentos únicos que fueron inmortalizados por un profesional que no sólo se asume deslumbrado, sino que busca la complicidad del público en ese sentimiento.
Ojeda Bello, recién llegado de China tras cumplir un programa de intercambio para periodistas extranjeros del Centro de Diplomacia Pública, ya presentó la muestra en su ciudad natal Las Tunas y ahora lo está haciendo en Guantánamo, otro territorio ubicado en la zona oriental, siempre bajo los auspicios de la Unión de Periodistas de Cuba (Upec).
Las 15 instantáneas, al decir de los curadores de la exposición, constituyen “una mirada como quien otea el horizonte, no desde la mítica muralla infranqueable incluida en las fotos, sino como desde un balcón que exhibe e invita a recorrer. Se trata de una suerte de caleidoscopio colorido y diverso para intentar recoger parte de una vida milenaria y su gente".
En el catálogo de la muestra, Ojeda Bello plantea que “conocer China es una aproximación; que sería apenas asomarse al abismo inconmensurable de una cultura de cinco mil años que hace parecer un chasquido de dedos a la de nuestra Latinoamérica”.
El periodista cubano admitió las dificultades que tuvo al escoger las imágenes para representar las costumbres, rostros y paisajes: “Dejé para el final la impresión de las instantáneas, para una selección más certera, además para incluir las marcadas diferencias de las estaciones del año. Estas son solo algunas de las muchas imágenes tomadas”, comentó.
La experiencia de trabajo del reportero le permitió además publicar varias de sus fotos en la web en español del Diario del Pueblo, el principal rotativo de la nación asiática, y en la revista argentina Dang Dai.
“Sean estas imágenes solo destellos de ese misterio encerrado en una forma de vivir que prioriza el bien colectivo, a la familia y al Estado; y que ahora mismo tiene ante sí el reto de preservar esos valores fundacionales ante el pragmatismo individualista y enajenante de Occidente”, resumió Ojeda Bello.