Según datos del Indec, la distribución del ingreso volvió a los niveles anteriores a 2018.
A pesar de la disparada de la inflación, por la mayor actividad, el aumento del empleo, en especial entre los trabajadores más precarios (sin aportes jubilatorios), las ayudas sociales y la disminución de la desocupación, hubo una mejora en la distribución del ingreso de los hogares y personas, según el Informe del INDEC del segundo trimestre de 2022.
La distancia entre el 10% más pobre de la población – quienes recibieron el 1,9% de los ingresos - y el 10% de los más rico, que obtuvieron el 30,7% de la “torta”—en un año se redujo de 20 a 16 veces, volviendo a los niveles anteriores a la pandemia y a la recesión iniciada en 2018 cuando esa distancia era de 18 veces.
Por su parte “el coeficiente de Gini del ingreso per cápita familiar de las personas fue de 0,414 mientras en el segundo trimestre de 2021 fue de 0,434, lo que muestra una importante disminución de la desigualdad”, según el Informe del INDEC. El 0,414 es inferior a 0,422 del segundo trimestre de 2018, antes del inicio de la recesión y la irrupción de la pandemia.
El coeficiente de Gini es un valor que varía entre 0 y 1. Cuanto más cercano a 1, mayor es la desigualdad en la distribución del ingreso y lo contrario cuando se acerca a cero (igualdad absoluta).
Para alcanzar estos resultados, a pesar de la mayor inflación, contribuyeron, en parte, el aumento de la gente ocupada – en especial los informales- y de los ingresos de los hogares con relación a las fuertes caídas de 2020 y 2021. También por las ayudas sociales.
Los asalariados sin descuento jubilatoria aumentaron en un año del 31,5% al 37,8% del total, lo que ilustra que la recuperación del empleo se apoyó fundamentalmente en los trabajadores más precarios.
En el caso de los hogares, los ingresos laborales representaron el 75,3% de los ingresos totales mientras que los ingresos no laborales alcanzaron el 24,7% restante. El peso de los ingresos no laborales fue mayor para los deciles de ingreso total familiar más bajos.
Los ingresos no laborales de los sectores de menores ingresos son AUH y otras ayudas oficiales, mientras entre los de mayores ingresos se refieren, fundamentalmente, a alquileres o ingresos o rentas por plazos fijos o inversiones financieras.
SN
