En Twitter dijo que "no voy a mentir ni esconder: estamos conversando" con una agrupación K para lanzar su postulación. Antes debería renunciar como juez de un tribunal oral.
El juez y militante cristinista Juan Ramos Padilla confirmó este viernes que negocia ser precandidato a jefe de gobierno porteño con el apoyo de una agrupación K llamada Nestornautas, entre otros. Si se confirma, Ramos Padilla tendrá que renunciar al tribunal oral de la justicia criminal porteña que integra.
“No voy a mentir ni esconder, es cierto que estamos conversando. Pero sabemos que no es fácil”, escribió en Twitter, tras criticar al jefe de gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta.
Luego dijo que “hay momentos en la vida que te exigen salir de una zona de confort. Veremos que pasa, pero no voy a mentir ni esconder nada”.
La candidatura del polémico juez fue lanzada por Marga Wirkierman de la agrupación K Nestornatuas y asesora en comunicaciones de la jefatura de gabinete de la Nación. También Ramos Padilla es aliado del ex asesor de Menem y ahora de Axel Kicillof, Jorge Rachid.
“Ramos Padilla será candidato a Jefe de Gobierno de CABA. El ama a la justicia pero está aceptando que todo su conocimiento y sus proyectos tienen que servir para mucho más! A días de la confirmación casi casi podemos decir que nuestro Juez del pueblo”, anunció Wirkierman en Twitter sin precisar si va a ir a las paso del Frente de Todos porteño.
Ramos Padilla es el padre del juez federal y electoral de La Plata Alejo Ramos Padilla quien avaló el Operativo Puf contra la causa de los Cuadernos de las Coimas.
Alejo una denuncia en el Consejo de la Magistratura por haber “mentido” en la comisión de juicio político contra la Corte. Su padre, también tiene varias denuncias en esa entidad y en la justicia penal, y es un impulsor de marchas para echar a los miembros de la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Está enrolado en el sector K que lidera el ex radical Leopoldo Moreau.
Ramos Padilla padre es miembro del tribunal oral 29 de la justicia penal ordinaria de la Capital Federal. En 1989 renunció al juzgado federal de Morón tras el escándalo del caso Juliana en el que entregó, a la fuerza, una niña adoptada a una familia de desaparecidos que se demostró luego que no tenía ningún vínculo de sangre con la pequeña.
