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Especialista tucumana explica que son las Vasculitis y cómo reconocerlas

La reumatóloga del hospital Avellaneda, Alejandra Pereyra, asegura que las Vasculitis pueden causar diversos tipos de problemas en el organismo dependiendo de dónde y cómo se produzca. La importancia de estar atentos a los síntomas generales que nos alertan.

Las vasculitis -explica en un artículo difundido por el Ministerio de Salud de la provincia-constituyen un grupo de patologías heterogéneo, su característica principal y común a todas ellas, es la inflamación de los vasos sanguíneos (arterias, arteriolas, capilares, vénulas y venas). Como consecuencia de esa inflamación se produce una disminución del flujo vascular o incluso una interrupción completa del mismo.

Al respecto, Pereyra, contó: “La vasculitis es una enfermedad de origen autoinmune, dentro de las enfermedades que consideramos colagenopatías se dividen en las que son osteoarticulares solamente y las que afectan a cualquier órgano del cuerpo. Dentro de este gran grupo de colagenopatías se encuentran las vasculitis, que son una inflamación de los vasos de las arterias. Como toda enfermedad autoinmune, se produce la inflamación mediada por autoanticuerpos que son los que forma el mismo organismo y perpetúa esa inflamación”.

Las vasculitis siempre afectan a las arterias. Dentro de los vasos están las arterias y venas. Existen distintas clasificaciones, vasculitis que solo afectan a la piel y otro tipo que aquejan a distintos órganos del cuerpo. También, se clasifican de acuerdo al tamaño del vaso que afecta o sea grandes arterias como por ejemplo la vasculitis de Takayasu, que implica a los vasos de los miembros superiores. Otro caso es la vasculitis de Wegener, que afecta a los vasos medianos como los del pulmón, corazón y riñón. Por otro lado, existen también vasculitis que afectan pequeños vasos, que son las arteriolas o arterias más pequeñas como la Poliarteritis nodosa que es una patología necrotizante.

“Cada una de estos cuadros tienen distintas sintomatologías, al afectar los vasos puede llevar a la necrosis de esas arterias. Depende de la parte del cuerpo a la que influye, como por ejemplo en el caso de las extremidades puede llegar a la necrosis y amputación de algunos de los miembros o afectar algún órgano interno y también a la destrucción de ese órgano como por ejemplo la vasculitis de Edenet que puede afectar el pulmón o el riñón y convertirse en un cuadro grave, esas serían las vasculitis primarias”, destacó.

Siguiendo esta línea la especialista detalló que también existen las vasculitis secundarias. “Como en todas las enfermedades autoinmunes, en las colagenopatías como lupus, esclerodermia, síndrome de Sjögren o artritis también puede haber vasculitis secundarias, es decir que afecte a los vasos pero que sean secundarias a esa enfermedad primaria que está diagnosticada antes”, agregó.

Las enfermedades autoinmunes pueden asociarse con otras enfermedades, como por ejemplo en la artritis reumatoidea es común la vasculitis reumatoidea, que afecta preferentemente a los miembros inferiores.

“Las vasculitis se presentan con un cuadro distinto dependiendo al lugar que afecte, si involucra a la piel se pueden presentar lesiones como urticarias. Si afecta a órganos internos como el pulmón o los riñones (que son las más frecuentes) puede existir falta de aire o hemoptisis, los cuadros son de diagnósticos diferentes”, enfatizó.

Por último, Pereyra comentó: “Frente a esta patología, el tratamiento debe ser urgente y requiere de internación, ya que son vasculitis que afectan a las extremidades que son vasos terminales como los dedos del pie, las manos, la nariz o la oreja. Es por esto que es prioridad que se revierta ese cuadro para que no se termine con pérdida de algunos de sus miembros. Para esto se pueden utilizar los tratamientos con corticoides alcalosis o medicaciones inmunosupresoras como la ciclofosfamida; en la actualidad hay agentes biológicos como el rituximab que son medicaciones biológicas que van hacia el mecanismo que perpetúa la inflamación. Eso logra que el paciente mejore más rápido e incluso que descienda el índice de mortalidad como pueden ser las grandes vasculitis como pulmón y riñón que quizás haciendo este tratamiento se reviertan rápidamente”, finalizó.