Argentina
This article was added by the user . TheWorldNews is not responsible for the content of the platform.

Vuelven las apuestas al CER por la mayor inflación esperada

El plan oficial para que abril muestre una inflación por debajo del 4% suena altamente improbable de cumplir

Dólar bajo presión: cuáles son los factores que empujarán al tipo de cambio todo el año

Tasas de interés: ya sopla una "brisa de cola" global que beneficia a la Argentina

La inflación sigue su marcha firme con las miradas puestas en el primer dato del 2023 que se conocerá el 14 de febrero. Ni San Valentín podrá poner algo de amor en la economía argentina: las principales consultoras de la plaza estiman que enero vendrá con un alza en torno al 6% para los precios al consumidor.

La carne es el principal factor detrás del rebote del IPC aunque todos los meses surgen factores que alimentan las variaciones del Indec. En enero, por ejemplo, el aumento en el transporte público en el AMBA, las tarifas, y otros. 

Febrero será nuevamente dominado por la carne, prepagas, y tarifas. De fondo predominan agregados monetarios como el M3 (los billetes y monedas en poder del público, cheques cancelatorios, depósitos públicos y privados en pesos) creciendo al 86% interanual. Los pasivos remunerados del BCRA están creciendo a tasas por arriba del 100% anual, y llegan a los $10,5 billones.

Apuestas al CER

Los títulos con cláusula CER en este contexto vuelven al "prime time". El BCRA que estaba sosteniendo los valores del TX24, ahora no lo hace ya que los precios están por encima del piso que les brinda la entidad que preside Miguel Pesce. 

Igualmente, todo es a corto plazo siempre en la Argentina y más si las apuestas son en pesos: junio aparece como nuevo horizonte de largo plazo para los inversores.

Las expectativas de inflación más elevadas impactaron no sólo en la deuda CER sino que hubo un reacomodamiento en general de las tasas en pesos. 

Para evitar el clásico traspase al dólar en la Bolsa, el MEP y el "contado con liqui", tanto el Tesoro como el BCRA debieron salir a convalidar nuevos retornos. 

En ese contexto se ubicó la movida y la marcha atrás parcial que hubo con las tasas prometidas para los Fondos Comunes de Inversión (FCI) de "money market", los de corto plazo en pesos. Recuérdese que hay invertidos en este segmento financiero casi $ 3,5 billones, los que con apenas un par de "clicks" desde una computadora pueden desarmarse. 

Incluso este renglón (los "money markets") deberían incluirse en los agregados monetarios para analizar inflación esperada dado que funcionan como una cuenta corriente remunerada.

Los precios de las Letras y bonos con clásula CER reflejan que, en promedio, para los próximos seis meses, se aguarda una variación de precios en torno al 6% mensual. 

Si se observan los diferentes rendimientos, según la consultora Equilibra, "las letras del Tesoro cortas están pagando una tasa efectiva mensual del 6,5%, la leliq a 28 días al igual que los plazos fijos minoristas, mientras que los pases pasivos a un día para FCI rinden apenas el 5,2%". El ritmo de devaluación (mercado oficial) está en el orden del 5,5%.

Por ello las expectativas existentes en la plaza financiera una vez más en los números que vaya arrojando el INDEC respecto de la inflación minorista en este primer semestre. Y en la reacción que vaya teniendo el Banco Central. 

El mercado está ingresando en un terreno de alta incertidumbre, por el mayor peso de las elecciones en las decisiones de inversión, y de la economía per se, con innumerables desafíos de corto plazo. 

El CER nuevamente se posiciona por encima del dólar linked: las apuestas son a que los precios le ganarán a la evolución del dólar oficial. 

Es un clásico argentino ante cada elección legislativa o presidencial, el atrasar el tipo de cambio, por más que el oficial sea casi simbólico por la cantidad de restricciones en su operatoria. Pero para cualquier Gobierno es imposible controlar todas las variables: el cepo paralelamente tiene su correlato en los precios. El partido recién comienza.