Mi nombre es Verónica Miranda Peña y apelo a la ley 19.733, sobre libertades de opinión y de información y ejercicio del periodismo, título IV del derecho de aclaración y rectificación, artículo 16 y artículo 20.
El día 19 de julio de 2023, CIPER publicó el artículo “Los nombres y nexos políticos detrás de las organizaciones que recolectaron donaciones para el plebiscito 2022”.
En este artículo, de manera mañosa y maliciosa, se habla de “que se rastreó la información sobre los representantes de las 163 Organizaciones de la Sociedad Civil que declararon haber recibido aportes para financiar campañas”.
La información sigue con “que el 56% de los representantes de las organizaciones civiles tenían algún tipo de vinculación política…”.
Además, dice “…que si bien los nombres restantes no tienen vinculación directa con el mundo político, muchos de los representantes de las organizaciones son figuras públicas, empresarios y/o abogados con tendencias políticas reconocidas, como era esperable”.
Agrega “…también hay un conjunto de representantes de quienes no hay huellas en internet o redes sociales, y la información sobre sus organizaciones es igualmente desconocida”.
Finalmente, dice “…en algunos casos los representantes parecieran no tener una relación aparente con la organización que representaron…”
Y luego CIPER publica la lista de las organizaciones que “recibieron aportes de privados”, el monto que recibieron y el nombre del representante.
En esta lista aparece ANAMIC, Asociación Nacional de Medios de Comunicación Independientes y Comunitarios, asociando mi nombre como representante.
Ante esto debo aclarar, públicamente, ya que ni el SERVEL ni CIPER lo han hecho, que:
- Primero: Nunca he sido representante legal de ANAMIC. La presidenta en ejercicio es Paulina Acevedo Menanteau y fue ella quien, junto a Fresia Ramírez, directora de Tomate Rojo, y el tesorero de ANAMIC, declararon los montos que aparecen en la plataforma de SERVEL. Mi nombre está asociado solamente porque yo hice la inscripción de ANAMIC en la plataforma del SERVEL, como pudo haberlo hecho cualquier integrante de la asociación, sin el título legal de representante.
- Segundo: El artículo de CIPER tiene la intención de acusar a todas las organizaciones de la sociedad civil de haber recibido aportes de privados para realizar campaña del apruebo, en este caso. Para ello, expuse más arriba los párrafos que utiliza, ya que, si bien es cierto ANAMIC no aparece nombrada entre los ejemplos que explicita, deja a la imaginación o suposición del lector que todos los que aparecen en la lista no actuaron con transparencia y recibieron aportes de privados cuyo destino es desconocido. La lista que publica es acusatoria y en el caso de ANAMIC, debo declarar que, en lo que respecta a mí, personalmente, JAMÁS he recibido aporte en dinero o de otra índole de parte de privados.
- Tercero: según las bases del SERVEL, aún cuando las organizaciones no recibieran aportes de privados, estaban obligadas a valorizar, a precio de mercado, la contribución de las personas de los diferentes medios que participaron en la campaña y que conforman ANAMIC, en relación a su trabajo de fotografía, de grabación, de creación y, además, de sus implementos utilizados (cámaras de grabación, de fotografía, etc).
- Es decir, se le asignó, de la forma indicada, y con valores que se acercaran estrictamente al costo de mercado de estas contribuciones, un monto que JAMAS he recibido ni de manera directa por aparecer como “representante”, ni de forma corporativa por haber participado de una asociación a la que ya no pertenezco desde antes de que se realizara este proceso ante el SERVEL.
Por esta razón, declaro públicamente que no soy ni he sido representante de ANAMIC, que jamás he recibido dinero alguno, que ya no pertenezco a ANAMIC desde antes que se iniciara este proceso ante el SERVEL y exijo que esta declaración sea publicada por CIPER en los mismos términos destacados en la señalada publicación, por el menoscabo y perjuicio que esto me ha provocado.
Sin perjuicio de ello ejerceré las acciones necesarias para que el SERVEL también aclare la información entregada a CIPER, la cual les sirvió de base para lanzar una injusta y ofensiva declaración, no sólo contra mí, sino también en contra de muchas organizaciones sociales que se han visto perjudicadas con este abuso de la mal llamada “libertad de expresión” ejercida por periodistas y reporteros de este medio de comunicación.
RESPUESTA DE CIPER
Doña Verónica Miranda sostiene que el reportaje de CIPER y LaBot, a su juicio escrito de manera “mañosa y maliciosa”, tuvo la intención de “acusar a todas las organizaciones de la sociedad civil de haber recibido aportes de privados para realizar la campaña del Apruebo”. No es así. El objetivo del artículo, como se desprende de su lectura, fue informar sobre quién financió y a quiénes se financió para la campaña del plebiscito 2022. En CIPER nos parece importante aportar al debate sobre la fórmula de financiamiento que el Servel aprobó para esa campaña, a objeto de que se puedan introducir correcciones en nuevos eventos electorales similares.
En las elecciones normales, los aportes para financiar campañas se efectúan, bajo control del Servel, directamente a los candidatos o partidos. Debido a que se trataba de una votación en la que no se apoyaba a un candidato o sector político, sino que se debía aceptar o rechazar una propuesta constitucional, para el plebiscito de 2022 se autorizó que se hicieran aportes a Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC), de manera de propiciar la participación de entidades ciudadanas con interés en la norma constitucional en debate. El reportaje de CIPER y LaBot intentó identificar a las OSC con vínculos políticos.
El reportaje no dice que Anamic tenga nexos con partidos o que haya irregularidades relacionadas con los aportes que declaró. De hecho, Anamic no aparece en el texto del artículo, sino en un cuadro adjunto que muestra la nómina de las 163 organizaciones que informaron al Servel haber recibido aportes. En ese cuadro tampoco se asegura que doña Verónica Miranda sea su representante legal, pues las OSC podían quedar inscritas ante el Servel con su representante legal o bien con un delegado. Asimismo, no dice que Verónica Miranda haya recibido un monto relacionado con los aportes reportados por Anamic. Sobre este punto, cabe destacar que los aportes no se hacían, necesariamente, en dinero. De acuerdo con las normas del Servel también podían ser «especies avaluables en dinero» o «servicios prestados en la campaña» que debían ser valorizados a precio de mercado. Esto significa, por ejemplo, que si alguien trabajaba como voluntario o facilitaba un vehículo o equipos de difusión, eso debía ser valorizado como una donación a la campaña y reportado al Servel.
La información oficial proporcionada por el Servel en respuesta a una solicitud hecha por LaBot a través de la Ley de Transparencia -a la que el Servel inicialmente se opuso y que aceptó sólo después de un fallo judicial-, indica que Verónica Miranda Peña quedó registrada como representante o delegada de Anamic. La circular 004 del Servel, del 26 de julio de 2022, señala que los delegados debían informar al Servel los aportes recibidos por su OSC, ingresando con su clave única a un sitio web. Si el Servel se equivocó y le asignó a Anamic aportes que no fueron reportados por Verónica Miranda o si alguien utilizó su nombre y su clave para registrar esos aportes, lo debe aclarar ese servicio público. Si el Servel corrige esa información, CIPER también incorporará una aclaración en el mismo reportaje.
Pedro Ramírez
Director de CIPER
