En el primer bimestre, se firmaron 21% más escrituras que durante el año pasado.
La cantidad total de escrituras de compraventa de inmuebles registró en febrero una suba de 11,5% respecto del nivel de un año antes, al sumar 1.738 registros, mientras que el monto total de las transacciones realizadas subió un 88,6%, con $ 30.966 millones.
El monto medio de los actos fue de $ 17.817.284 (89.637 dólares, de acuerdo al tipo de cambio oficial promedio): creció 69% en un año en pesos, y en dólares bajó 4,8%.
En febrero, hubo 71 escrituras formalizadas con hipoteca. Por lo que la baja en ese sentido es del 42,7% respecto al mismo mes del año pasado.
Sobre la evolución del mercado, Jorge De Bártolo, presidente del Colegio porteño señaló: “El bimestre nos está dando una suba de 21% respecto al año pasado, pero sin dejar de marcar que es un escenario muy bajo de cantidad de escrituras".
Si bien los primeros dos meses del año son los de menor actividad, febrero dejó una baja intermensual respecto a enero. Insistimos nuevamente con la dimensión que tiene el crédito y en este mes fueron apenas 71 hipotecas. Ese indicador claramente necesita ser incentivado”.
Qué pasa en Provincia de Buenos Aires
En la provincia de Buenos Aires, en tanto, la cantidad de operaciones sumaron en febrero 4.253 escrituras, lo que representó un incremento interanual de 0,26 % en comparación con las 4.242 que se registraron el mismo mes de 2022, según el Colegio de Escribanos bonaerense.
En este caso, en la comparación con el mes anterior hubo un aumento de 10,44% contra las 3.851 operaciones de enero.
Según los datos de la entidad, en el mismo lapso del total de operaciones se hicieron 575 hipotecas, con un incremento interanual de 1,95% (564 en febrero de 2022) y una suba de 39,23% con respecto a enero (413).
“En el segundo mes del año vemos pocos cambios, que refuerzan el panorama que venimos analizando desde hace varios meses. El mercado muestra pequeñas variaciones que aún no permiten hablar de consolidación”, dijo el presidente del Colegio bonaerense, Diego Molina.
No obstante, subrayó que, “si se mantienen ciertas variables que se han observado desde el cierre del año pasado, puede haber buenas perspectivas para este 2023, aun cuando sea un año electoral y la inflación continúe siendo considerable”.
NE
