El Gobierno anunció anoche una serie de medidas de "alivio" fiscal para unos 54.100 productores agropecuarios golpeados por la sequía. Los incentivos estarán por el lado de los impuestos y las tasas de interés, ya que el "campo" tendrá créditos subsidiados y el Banco Central (BCRA) eliminará el diferencial de tasa para quienes retengan stock de la cosecha, según comunicó el Ministerio de Economía tras una reunión de Sergio Massa con dirigentes de la Mesa de Enlace.
A través de un fondo rotatorio en articulación con provincias y municipios, la Nación dará asistencia directa a cada uno de los productores afectados por la sequía. Quienes estén abarcados por la emergencia agropecuaria también verán suspendida la obligación de pago del anticipo del impuesto a las Ganancias (la Administración Federal de Ingresos Públicos -AFIP- va a poner el ojo en quienes hayan declarado más de $ 50 millones de ganancia en 2022).
La agencia tributaría suspenderá los juicios de ejecución fiscal y los embargos de las cuentas corrientes. Además, la AFIP tendrá en cuenta que unos 4200 productores malvendieron su hacienda en el último trimestre del año pasado por la falta de alimento en los campos y la necesidad de hacerse del dinero, por lo que no les contará esas operaciones para el cálculo de Ganancias.
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