CIUDAD DE MÉXICO, septiembre 29.— El Grupo de Puebla comenzó este viernes su IX Encuentro en la ciudad mexicana que vio nacer a la instancia integradora, con el propósito central de instalar lo que llamó su «política exterior progresista» para combatir el hambre, la pobreza, los bloqueos económicos, la crisis climática y la desglobalización, según adelantó en un comunicado que citó Telesur.
El encuentro quedó abierto por el coordinador del Grupo de Puebla, Marco Enríquez-Ominami, y el gobernador poblano, Sergio Salomón Céspedes, con la presencia de los expresidentes de Colombia, Ernesto Samper, y de Bolivia, Evo Morales, así como del jurista español Baltasar Garzón, mientras se esperaba la llegada de otros exmandatarios. Los presidentes Alberto Fernández, de Argentina, y Luiz Inacio Lula da Silva, de Brasil, enviaron mensajes de saludo.
Céspedes dio la bienvenida a las personalidades invitadas, procedentes de 21 países, y calificó el encuentro como el foro de una lucha importante por la integración, la unidad y contra la desigualdad, y dijo que en esos terrenos hay mucho que avanzar todavía, reportó PL.
En su condición de coordinador de la Unasur, el expresidente colombiano Ernesto Samper recordó acerca de la necesidad de la integración regional, pues de lo contrario será muy difícil superar la crisis que afecta a todos los latinoamericanos y caribeños.
En esa dirección, Samper exhortó a ampliar y fortalecer el grupo con un enfoque en materia de igualdad, libertad, unidad e integración para el desarrollo, que fueron objetivos del primer llamamiento que le dio origen, pero ahora con más razón, pues el mundo convulsiona.
En cinco años, dijo, hemos padecido de todo, un deterioro de las relaciones internacionales, desafíos a la capacidad de los gobiernos para dar respuestas a demandas sociales y fuimos las principales víctimas de la Covid-19, al poner la mayor cantidad de muertos por la situación económica degradada, señaló Samper, según el despacho.
Ahora, dijo, tenemos la guerra en Ucrania, que genera inflación y escasez de alimentos y se roba grandes recursos financieros que pudieran ser utilizados para el bienestar, en lugar de afectar el suministro de combustible y crear crisis alimentaria.
Habló también del cambio de época con una desglobalización en el mundo que genera la necesidad de buscar otros caminos en las relaciones internacionales; de allí la trascendencia de más integración y multilateralismo. Esos son temas en los que nos concentraremos en este encuentro del grupo, anunció.
Samper reveló que en estos días de debate se analizarán propuestas sobre la base de tres ejes principales: fortalecer la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac,) enfocada hacia un nuevo mundo político; considerar a la Unasur como parte de la familia latinoamericana y caribeña, que se extienda a toda la región; y, finalmente, hacer énfasis en los procesos de integración económica, política, social, cultural, pues «de lo contrario nos morimos».
Esa integración, dijo, pasa necesariamente por la creación de una nueva arquitectura financiera, la cual vamos a proponer mañana, con bancos regionales, sin intervención de depredadores como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, y sin ninguna condicionalidad.
Estamos hablando, agregó, de una nueva estructura de alianzas estratégicas que puede incluir a otras regiones como Asia.
Samper cuestionó a fondo la inmoralidad, ilegalidad e inconveniencia de la política de sanciones que imponen Estados Unidos y la Unión Europea, como sucede con los casos de Venezuela y Cuba, esta última víctima de un bloqueo de más de 60 años que el pueblo enfrenta heroicamente.
Por su parte, Evo Morales refrendó las palabras y observaciones de Samper y añadió que ese panorama descrito por su colega colombiano demuestra que hay una crisis significativa en el sistema imperial de Estados Unidos y, en general, del modelo económico y social que lo sustenta.
Evo llamó a una defensa de la plurinacionalidad, a la unidad y a la defensa de la soberanía política, social, cultural y económica, y a seguir la batalla contra las transnacionales, para que dejen de saquear a los países, y respeten la dignidad de nuestra diversidad y de nuestra identidad.
Baltasar Garzón dijo por su parte que está en el grupo en su condición de jurista para denunciar las ilegalidades y violaciones del Derecho Internacional por parte de Estados Unidos, la Unión Europea y la Organización de Estados Americanos (OEA) bajo el liderazgo de Luis Almagro, en particular, el régimen de sanciones extraterritoriales como el bloqueo a Cuba.
La cita concluye el domingo.