Celebración que coincide con el centenario de la Casa Consistorial porriñesa, obra del arquitecto en su villa natal, a quien se dedicará una sala de exposicones con su nombre
El Concello de O Porriño prepara un amplio programa cultural para conmemorar el Centenario de la Casa Consistorial, la obra más representativa de las diseñadas por Antonio Palacios en su Villa natal. Una efemérides que coincide con el 150 aniversario del nacimiento del arquitecto y que el Concello celebrará con una amplia programación. “Antonio Palacios es un absoluto referente para los porriñeses y queremos poner en valor su legado, en especial el que nos dejó en Porriño”, explica el alcalde, Alejandro Lorenzo, recordando que en 2024, “Palacios estará, si cabe, más presente que nunca en O Porriño”.
Lorenzo avanza que una de las grandes propuestas del Centenario será la apertura de la “Sala de Exposiciones Antonio Palacios”, con una muestra permanente de todos sus textos, dibujos, planos, maquetas y documentos. “Tenemos mucho material original de gran valor, que es un auténtico tesoro cultural que queremos dar a conocer al gran público, además de impulsar la ‘Ruta Palacios’ como reclamo turístico y cultural”. El grueso de la programación –indica el alcalde-, “girará en torno al edificio de la Casa Consistorial, la obra más emblemática diseñada por Palacios para su Villa natal”. Un edificio singular que alberga el Ayuntamiento, seña de identidad de O Porriño cuyo proyecto fue un regalo de Palacios al Concello en septiembre de 1919, pero por dificultades económicas, las obras no se pudieron iniciar hasta 1921, cuando el Indiano Ramón González Fernández, anunció que sufragaría los gastos de la construcción.
Trabajos bajo la dirección del constructor y maestro cantero Manuel Ruibal Solla, que finalizaron en septiembre de 1923. El 25 de septiembre de 1976, el edificio sufrió un demoledor incendio que arrasó la estructura de madera del interior y las hermosas vidrieras de la fachada lateral, donadas por el propio Palacios, que se sustituyeron por unas nuevas ante la imposibilidad de recuperar el diseño original de la casa Maumejeam. La rehabilitación, proyectada por los arquitectos Tomás Pérez-Lorente Quirós y Francisco Yáñez Ulloa, se realizó entre 1980 y 1983, manteniéndose sin alteraciones las fachadas, vestíbulo y escalinata de honor, conservándose el emplazamiento original del salón de sesiones que, en 2001, con un proyecto de los arquitectos Manuel Freijeiro y Luis Sarasquete, se reubicó en el edificio contiguo.
