Alfonso Rueda se la juega en las próximas autonómicas y no quiere sorpresas en uno de los graneros de votos de los populares. Con las elecciones a la vuelta de la esquina, todavía sin fecha definida -aunque parece que será a primeros del 2024-, la estrategia es clara: el presidente gallego va a por el voto sénior en una de las autonomías más envejecidas de España. El último anuncio lo hizo este miércoles por sorpresa durante su comparecencia en el Parlamento gallego en respuesta a la líder de la oposición. "Todos los gallegos y gallegas mayores de 65 años podrán viajar gratis en los autobuses de la red de transporte público de la Xunta de Galicia a partir del 1 de enero del 2024", avanzó Rueda.
Alfonso Rueda se la juega en las próximas autonómicas y no quiere sorpresas en uno de los graneros de votos de los populares. Con las elecciones a la vuelta de la esquina, todavía sin fecha definida -aunque parece que será a primeros del 2024-, la estrategia es clara: el presidente gallego va a por el voto sénior en una de las autonomías más envejecidas de España. El último anuncio lo hizo este miércoles por sorpresa durante su comparecencia en el Parlamento gallego en respuesta a la líder de la oposición. "Todos los gallegos y gallegas mayores de 65 años podrán viajar gratis en los autobuses de la red de transporte público de la Xunta de Galicia a partir del 1 de enero del 2024", avanzó Rueda.
Será una ayuda lineal mediante un carné que cada gallego mayor de 65 años recibirá directamente en su domicilio en las próximas semanas, sin tener que tramitarlo para empezar a disfrutarlo en todos los trayectos interurbanos en 2024: año electoral. Su funcionamiento será muy similar al Carné Xove para menores de 30, pero que en este caso tendrá como beneficiarios a los mayores de 65 años con un programa de descuentos en actividades de ocio y viajes. Esta medida fue avanzada por Rueda a primeros de octubre durante del debate sobre el estado de la autonomía, junto con un bono universal a la dependencia de 5.000 euros para todos los usuarios (grados 1, 2 y 3), más un complemento de 1.200 euros si acuden a un centro asistencial, pero es ahora cuando se va desgranando la letra pequeña de ese Carné+65 en anuncios como este de la gratuidad del transporte en las líneas públicas.
Esta medida, indican fuentes del Gobierno gallego, ya está presupuestada en las cuentas para 2024 y se aprobará en el Consello de la Xunta. Está enfocada a incentivar el transporte público entre los mayores y favorecer la movilidad entre los que dependen del bus para desplazarse en el rural para hacer gestiones, compras o acudir al centro de salud, Sigue la línea de una de las medidas más aplaudidas del Ejecutivo de Alberto Núñez Feijóo, que en diciembre del 2019, también en vísperas de otro año electoral, anunció la gratuidad de los viajes para menores de 21 años desde el 1 de enero del 2020. Primero en los trayectos urbanos, pero poco después se amplió a los interurbanos para favorecer la movilidad entre campus universitarios con más de 150.000 usuarios.
Rueda tendrá que ganarse en las urnas la presidencia que heredó de Feijóo tras la mudanza a Génova y se está aplicando a fondo. En pocas semanas, ha concentrado un carrusel de anuncios, ayudas y rebajas al que, a buen seguro, aún le queda recorrido hasta la convocatoria de las autonómicas y que ha irritado a la oposición. Por el momento, tarifa plana de 0 euros para autónomos en su primer año de la actividad, un bono deporte de 120 euros para todos los menores de 6 a 16 federados en algún deporte y otras rebajas fiscales: del 8 al 3% en la venta de coches de segunda mano y un punto menos en la transmisión de viviendas (8%). Desde el PSdeG y el BNG cargan las tintas contras las "medidas salvadoras" y "electoralistas" de Rueda. El presidente y la portavoz del Bloque, Ana Pontón, se enfrentaron en el Pleno después de que el presidente acusase a los nacionalistas de "despreciar" a los mayores porque "dicen que no saben votar" y que ella calificó de "insidia".
Descuentos, bonos y ayudas
La precampaña gallega empezó de facto sin previo aviso cuando el PP de Galicia echó a rodar un bus por los pueblos y parroquias del rural para acercar al presidente Rueda al electorado con una invitación a una caña sin alcohol para charlar de lo mundano. La estrategia del PP de Galicia de concentrar parte de los anuncios de corte electoral en este segmento de la población (+65) para 2024 tiene su lógica matemática y política. Galicia (213%) es, junto con Asturias (239%) y Castilla y León (211%), uno de los territorios donde la tasa de envejecimiento de la población supera el 200%, de acuerdo a los datos del INE del 2022.
El 26,09% de los gallegos han cruzado la barrera de los 65 y la tasa de dependencia a partir de esta edad es del 42,28%. Es decir, la cuarta parte de los 2,6 millones de habitantes de la comunidad: seis puntos por encima de la media estatal, situada en el 20%. Son la llave en cualquier proceso electoral en Galicia para repartirse los 75 escaños, más si tenemos en cuenta la diferencia en la densidad de habitantes entre A Coruña y Pontevedra, las provincias atlánticas más jóvenes y urbanas, y las dos orientales: Ourense y Lugo -rural, interior y dispersa- donde se concentran las personas de más edad. La población de A Coruña prácticamente cuadriplica a la de Ourense, pero son las provincias menos pobladas las que acaban pesando más, de acuerdo a la ley de D’Hondt.